Pregunta:
Algunas
personas me han dicho que estar en yugo desigual se aplica
exclusivamente en el matrimonio. Otros dicen que se puede aplicar en
asociaciones de negocio y otras situaciones. ¿Podría profundizar sobre
esto? ¿Qué significa estar en yugo desigual y qué tipo de directriz debo
seguir, si para mí es correcto tener una asociación de negocios con un
incrédulo?
Respuesta:
Bueno,
esa es una pregunta importante. Segunda Corintios, capítulo 6, se trata
sobre lo que estás preguntando. El concepto de “yugo” te da la clave.
Un yugo era algo que se les ponían a dos animales para el arado, o para
jalar una carreta, en una empresa común.
En
2 Corintios 6:14 y 15, Pablo dice, “No os unáis en yugo desigual con
los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la
injusticia? ¿Y qué comunión la luz con las tinieblas? ¿Y qué concordia
Cristo con Belial? ¿O qué parte el creyente con un incrédulo?”
El
punto de eso es si estás bajo el mismo yugo, jalando el mismo arado
bajo el mismo surco – eso es, si estás trabajando juntamente en la misma
empresa, en la misma asociación con un incrédulo – tienes un problema.
Verdaderamente,
eso se referiría al matrimonio porque ¿no hay un yugo más firme,
fuerte, y atado que el matrimonio, verdad? Si vas más allá de eso y
preguntas, “¿Qué de la asociación de negocios?” dependería en la
naturaleza de la asociación. Si, por ejemplo, hay una asociación
limitada incluyendo un grupo de inversionistas y tú eres uno de ellos,
eso es una cosa. Una persona puede poner dinero en un banco; eso es una
forma de asociación con otras personas. Pero no creo que ese sea el
asunto aquí.
El
punto es de asociarse con un incrédulo, lado a lado, bajo el mismo
yugo, jalando el mismo surco, en la misma dirección, con las mismas
metas y objetivos. Ahora, eso puede significar una asociación en un
negocio común – y es probable que la naturaleza de tu asociación dirija a
situaciones comprometedoras en el futuro cuando sus puntos de vista
choquen.
Más
allá de eso, sin embargo, la aplicación primordial de 2 Corintios 6 es
referente a una empresa espiritual. La advertencia primordial es de
nunca juntarse con un incrédulo en actividades espirituales.
Entonces
la cosa obvia, primeramente, es de evitar cualquier empresa espiritual
común con un incrédulo (incluyendo cosas como el matrimonio o el
ecumenismo religioso). Y segundo, de ser muy cuidadoso en otras áreas de
la vida (como el negocio) si estás jalando el mismo yugo con un
incrédulo, es inevitable que habrá conflicto – porque el estándar por el
que operas es inherentemente diferente.
Prácticamente
hablando, tú tendrás que juzgar, lo que incluye una asociación en
particular y si puedes ser parte de ella – basado sobre principios
bíblicos, la oración y el consejo piadoso. El Espíritu de Dios te guiará
en eso.