miércoles, 12 de diciembre de 2012

Tiempo con Dios - Salmo 27:14; 26:1-2

 Las Sagradas Escrituras están repletas de referencias al valor de esperar al Señor y pasar tiempo con Él.  Cuando lo hacemos, la basura que hemos recogido durante las horas apuradas, atareadas del día, se filtran, de manera parecida al cieno que se asienta cuando el río se hace más ancho. Con la basura fuera del camino, podemos ver las cosas más claramente y entender los acicates de Dios con mayor sensibilidad.

David con frecuencia subrayó los beneficios de pasar tiempo a solas. Estoy seguro de que él se familiarizó con esta disciplina al apacentar las ovejas de su padre. Más tarde, durante los años tumultuosos cuando el rey Saúl estaba al borde de la locura y lo perseguía por envidia, David halló que su tiempo con Dios no sólo era un refugio necesario sino también su medio de sobrevivir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario