domingo, 4 de noviembre de 2012

JESÚS, SALVADOR, SANADOR Y SANTIFICADOR - Marcos 1-3

Las cosas excelentes cuestan. Un Evangelio barato, de oferta sin demanda, es un Evangelio falso; en cambio el que proclamó el Señor Jesucristo, le costó la vida; además, Él vino a salvar a los pecadores.
Marcos 2:17 dice: “Jesús lo oyó, y les dijo: Los que están sanos no necesitan médico, sino los enfermos. Yo no he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores”

Guthrie dice: “El Evangelio de Marcos, es el más antiguo de los cuatro. Su autor es Juan Marcos. La fecha difiere, pero hay una entre 55 y 60 DC que no es extremista. El lugar que fue escrito es Roma. Hay influencia de Pedro. Se destaca Galilea como Ministerio. La vivacidad de la narración sugiere un testigo ocular de primera mano... Este evangelio coloca en el centro la personalidad de Jesús y su obra redentora a favor del hombre”.

Marcos 1 presenta a Juan el Bautista, cual Heraldo que preparó el camino, para la venida del Mesías, quien fue bautizado por Juan en el Río Jordán y luego fue tentado por el diablo. Principia su Ministerio en Galilea, proclama el Evangelio del Reino y llama a Pedro, Santiago y Juan al Ministerio. Luego expulsó un demonio, sanó a muchas personas, incluyendo a la suegra de Pedro; recorrió Galilea predicando, tuvo misericordia y sanó a un leproso.

Marcos 2, exhibe a un Cristo, que sanó a un paralítico, pero que perdonó pecados, que rompe los moldes, de un ayuno triste para servir con alegría y de alimentar a los discípulos en día Sábado, y pone al ser humano por encima de la ley, que ayuda, pero no debe esclavizar, sino liberar y servir.

En Marcos 3, Jesús sanó a un hombre de mano seca, pero los malvados fariseos y herodianos querían destruirlo. Una multitud lo oye y es sanada. El Señor seleccionó a sus 12 Apóstoles. Es acusado por sus enemigos de echar demonios por medio del diablo. El Señor denunció que las personas que atribuyen la obra de Dios, al diablo, blasfeman contra el Espíritu Santo y son reos de muerte eterna. Luego, su madre y hermanos lo buscan y Él dice que toda persona que haga la voluntad de Dios, es su hermano y su familia.    Jesús fue más que un sanador, un curandero. Él fue misericordioso, sanó por amor y sirvió al pobre para adorar a Dios.  Si es creyente, visite y testifique de Jesús.

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